Intentar resumir 4 días de música en vivo es difícil y más cuando es en un festival del calibre de Europavox. Un festival en el que la calidad y la frescura prima por encima de nombres del pasado y artistas agotados. La primera regla del festival es que el artista europeo en cuestión tenga calidad en su propuesta, tenga algo que decir en 2018 y sobre todo se le vislumbre un futuro. Solo hay que ver carteles pasados y alucinar con los artistas que pasaron por este festival cuando estaban empezando a labrarse un nombre. Los periodistas allí reunidos coincidíamos en que este año la gran mayoría de artistas eran francófonos y de música urbana/rap etc… Pero es que el panorama actual invita a eso. Las guitarras están muertas. Imaginaros a 50 artistas de 22 países europeos diferentes, un menú gourmet al alcance de muy pocos.

1- Eddy De Pretto
Ganador absoluto del festival, el escenario mediano y su hora de recital se le quedaron pequeños. Momentos emocionantes por docenas con un repaso completísimo a “Cure”, sin dudarlo el disco del año. Armado con su iPhone y un batería como único acompañamiento, aparte de un simple pero efectivo juego de luces. Eddy llevó al éxtasis a todos los reunidos. La selección francesa acababa de eliminar a Argentina y ya en la espera a su actuación, el público cantó voz en pecho “La Marsellesa” de ahí en adelante la locura se apoderó del respetable. “Kid”, “Ego” o “Mamere” son cortes infalibles y la voz de Eddy sonó poderosa como pocas, “Fete De Trop” atronó como el himno generacional que ya es. Prometedor.
2- Orelsan
Sobre el papel el gran cabeza de cartel y de no ser por un inspirado Eddy se habría llevado el oro con una gran actuación, espectaculares los audiovisuales y los juegos de luces. Orelsan con un amplio repertorio bajo el brazo y con el público a sus pies desde el primer instante, ofreció un show muy completo con 90 minutos de gran calidad, pero Eddy le adelantó por la derecha. Profesional.

3- Feu! Chatterton
Hace 4 años que los vi en Paris y me dejaron sin habla, un grupo de rock elegante, donde las letras son poesía y la música lo envuelve todo de una sonoridad adictiva. La lastima fue verlos a pleno sol y con escasos 50 minutos pero la solvencia y la entrega de todos y sobre todo las canciones de su último y redondo trabajo salvaron el honor de las guitarras más clásicas. Épicos.

4- Témé Tan
El belga de origen congoleño lidió con el duro papel de abrir el festival, y aunque su música se disfruta más en la oscuridad de un club, sonó aún mejor que el año pasado. Nos volvió a enamorar con su mezcla de estilos urbanos actuales y los ritmos triviales del continente africano. Interesante.
5- Hollysiz
La hermana de Vicent Cassel demostró que tiene tablas en el escenario y sobre todo canciones. Su pop vigorizado cercano a los origines de Lady Gaga, pusieron al público en efervescencia. Con una banda muy potente y engrasada Hollysiz fue una pantera en acción. Todos nos llevamos algún que otro rasguño a casa. Potente.

6- Rilès
El francés de origen argelino tiene una legión inimaginable de seguidores en el país vecino, y eso que todo en él tiene un aire de clandestino e indie que asusta. Tenía todos los ingredientes para haberse colado en el podium pero una mala elección de orden en el tramo intermedio de la actuación lo arruinó un poco. Su rap fresco y pegadizo hizo las delicias de la chavalada sobretodo con el arreón final en el que enlazó tres de sus mejores cortes. “Brothers”, “Pesetas” y “Do It” fueron el final a un concierto que me dejó con ganas de más y de escribirle el setlist. Desaprovechado.
7- Rat Boy/Cabbage
Si el año pasado fueron Shame los que pusieron la nota punk británica esta vez fueron estas dos bandas las que llenaron de rabia adolescente y tonadas punk la idílica ciudad de Clermont-Ferrand. Rat boy con toques a Beastie Boys y Cabbage supurando rabia como si fueran una versión 2.0 de The Fall. Para seguirles la pista a ambos. Los segundos ya han sido llamados por Miles Kane para acompañarle de teloneros. Fieros.
8- Kid Francescoli
El trio francés es de una elegancia exquisita, su pop electrónico de aires similares a Saint Ettiene, por poner un ejemplo, encandiló a todos los que se acercaron a verlos. Su música te atrapa y sus melodías se te adhieren al cerebro. Una lástima que no tocaran más tiempo y con más gente pendientes de ellos. Elegantes.

9- Edsun
Este luxemburgués fue para mí la gran sorpresa del festival con un R&B fresco, vitaminado y por momentos sublimes, nos entregó la actuación más sobrecogedora de los 4 días. Mezclando su música con la danza contemporánea demostró ser igual de bueno cantando que bailando y con pocos medios dio el campanazo del festival, quizás que su actuación fuera en el escenario Club ayudó pero os prometo que me dejó sin habla. Un animal escénico y digno heredero de Michael Jackson. Enigmático.
10- Yung
Afirmar como hice antes que las guitarras están muertas quizás sea algo exagerado, o al menos eso pensé durante la efectiva actuación de los daneses Yung, un grupo de rock brioso que con ciertos tintes de grunge nos entregaron un concierto plagado de canciones de rock de las de antes, de cuando Pearl Jam molaban y de cuando empuñar una guitarra no te hacía parecer un cavernícola. Atemporales.
// Fotografías por Marcos Molinero
// Imagen de portada de Feu! Chatterton