En primer lugar, me gustaría sincerarme con el posible lector, aclarando que ni conozco bien la obra de Galdós -del cual solo “leí” Fortunata y Jacinta cuando iba al instituto, y ni eso: me hizo un resumen una amiga justo antes del examen-. Y con la obra de Rayco Pulido me pasaba un poco lo mismo: desconocía su existencia hasta que hace unos meses cubrí la noticia de que le habían otorgado el premio Nacional de Cómic por Lamia, momento en el que empecé a interesarme por el autor y su obra.
Nela es la adaptación del clásico de Benito Pérez Galdós Marianela, escrito en 1878. Una tragedia sobre una huérfana que hace de lazarillo para un chico ciego de buena familia, del que está enamorada. La visita de un famoso oftalmólogo que puede curar la ceguera de su amado desencadenará la trágica historia que ha sobrevivido al tiempo.
Rayco Pulido, al plantearse esta adaptación, pretende hacer suya la obra, pero respetando el texto original. Sin simplificaciones ni esas “versiones light” a las que tan a menudo nos hemos visto expuestos cuando se han hecho adaptaciones literarias al campo de las viñetas. Esas adaptaciones juveniles para acercar grandes obras a lectores infantiles -o vagos- quedaron atrás gracias a reinterpretaciones como la realizada por Mazzuchelli sobre “La ciudad de cristal” de Paul Auster.
Gracias a su experimentación con las viñetas, Pulido mantiene perfectamente la esencia de la obra galdosiana y, además, aporta parte de su alma con sus lápices, limpios y simples, pero llenos de belleza gracias al tratamiento del color o, mejor dicho, a la ausencia de éste: toda la obra está trazada en un majestuoso blanco y negro, que solo se ve interrumpido por secuencias con ocres que enmarcan pasajes oníricos, llenos de misticismo.
Nos encontramos ante un gran cómic (y un gran autor) y un ejemplo de ello lo tenemos en cómo Astiberri, en una decisión que es todo un acierto, le ha dado la libertad no solo de crear el cómic, sino también de encargarse del diseño y la maquetación del mismo.
Una novela gráfica de 168 páginas que traslada al lector a una obra magnifica y atemporal, tan en boga a finales del siglo XIX como hoy en día. No dejéis pasar la oportunidad de acercaros a esta obra.