Una invitación para una cena secreta. Un autobús lleno, cuarenta personas, prácticamente todas desconocidas. Un objetivo: dejarse llevar a través de los sentidos con la degustación de un maridaje redondo, un menú exclusivo creado para la ocasión por la chef valenciana Rakel Cernicharo (Karak) y regado con tres de las referencias de Cervezas Alhambra.
Así se presentaba Noches Cervezas Alhambra, la nueva experiencia gastro más top del momento en la ciudad de Valencia. Pinta bien, ¿no?

El lugar donde transcurrió este encuentro no pudo ser más ideal. Nos dejó a todos los invitados con la boca abierta. Literal. Instagram echaba humo con los stories. Y es que todo -absolutamente todo- hasta el más minímo de los detalles, estaba cuidado con una exquisitez digna de admirar. El escenario elegido fue la Masía Moroder, una preciosa villa familiar, situada en Moncada, en medio de campos de naranjos. Una finca insólita y preciosa, con unos suelos de baldosa hidráulica que eran una maravilla, techos altísimos con unas molduras increíbles, una escalera de madera espectacular y unos ventanales que eran pura fantasía.

Ya en la entrada, en la terraza cubierta de la casa, pudimos disfrutar de un riquísimo aperitivo donde probamos cuatro tentempiés la mar de originales: Cereza Queso Stilton, Bolita de Foie, Croqueta de Pollo y Bombón de Porcelana y que acompañamos con las primeras cervezas Alhambra Especial bien fresquitas. Además, pudimos ver la artesanía de Mitumi, una marca de joyería artesana, minimalista y atemporal que nos obsequió con una pieza con baño de plata y nuestra inicial grabada.



Y cuando entramos al salón principal ya fue el acabose. Frente a nosotros la inmensidad de una sala, que como ya he dicho antes, nos dejó alucinados. A ritmo de jazz en directo fuimos sentándonos en nuestros respectivos sitios, en una mesa decorada con unos centros florales fantásticos y esperando ansiosos a probar las creaciones culinarias de Rakel, inspiradas en los aromas, matices y peculiaridades de las tres referencias principales de la familia de la cervecera: Alhambra Especial, Alhambra Reserva 1925 y la recién llegada Alhambra Reserva Roja, como baluarte principal.

Sin duda, una cena de lujo llena de sorpresas, en la que gastronomía valenciana, artesanía y Cervezas Alhambra fueron de la mano. Además, durante la cena, el experto beer sommelier Julio Cerezo estuvo explicando cada cerveza que íbamos degustando, su coherencia con el plato preparado por Rakel, sus aromas, texturas y particularidades. En fin, un lujo para los sentidos.

La propuesta gastronómica para la cena fue la bomba. Como platos principales pudimos degustar Coca de Cristal y Paté de Morcilla, Ensalada con Mouse de Sardina Ahumada, Vieira Ahumada con Aguacate, Tartar de Gambón con Clamato, Lima y Mezcal, todos los platos aderezados con la emblemática Alhambra Reserva 1925.



A continuación, Caldo de Setas y Pulpo, Black Salmón (de lo mejorcito que he probado en mucho tiempo) y Pastela de Cordero, y de postre Remolacha y Queso Servilleta y Cristina de Avellanas, que fueron las propuestas pensadas para complementar el sabor de Alhambra Reserva Roja, la nueva referencia de la gama, y poner así el broche de oro a la experiencia.


Gran velada, magnífica propuesta y una excelente puesta en escena para dar a conocer esta marca de cervezas granadina. ¡Salud!