A Enric Alepuz muchos lo conoceréis por ser el batería de dos de los grupos de música con más relevancia de la escena valenciana: Gener y Tórtel. Lo que algunos de vosotros no sabréis es que no solo de la música vive el hombre y que Enric, además de moverse de festival en festival, también es diseñador gráfico, y de los buenos. Quizás más de uno haya llevado uno de sus diseños en el codo o en el pecho porque también es uno de los miembros fundadores de la divertida y carismática empresa de tattoos temporales Tattoonie. Estas dos semanas de abril sus diseños serán nuestra carta de presentación y hemos querido aprovechar la ocasión para conocerle un poco mejor.
Muchos de nuestros lectores te conocerán por ser el batería de Gener y de Tórtel, pero muy pocos sabrán que eres diseñador gráfico. ¿Qué te encaminó hacia el diseño?
Desde muy pequeño ya jugueteaba haciendo logotipos, carteles, dibujos… Mientras estudiaba el bachillerato de artes aprendí el oficio en un estudio bastante grande que tenía cerca de casa. Sentía que era algo a lo que me quería dedicar.
Eres el fundador de Tattoonie, una empresa de tatuajes temporales con la que llevas 6 años. ¿Cómo surgió la idea y cómo has conseguido mantenerla durante tanto tiempo?
A mi compañero Tristan se le ocurrió en un verano donde no podía parar de comprarse calcomanías de los bazares chinos, así que decidimos trasladar esa idea a nuestro universo estético. Nos hemos mantenido porque es un producto muy dinámico, fácil de actualizar y donde no hemos encontrado mucha competencia en España.
En Tattoonie participan casi 70 diseñadores, desde Belén Segarra hasta Miguel Noguera. ¿Qué criterio sigues para seleccionar a los artistas?
Nos sentimos muy agradecidos de haber podido trabajar con tantos artistas en estos seis años. Cada vez que vamos a hacer una nueva tirada ponemos en común nuestros últimos descubrimientos o artistas fetiche y así elegimos con quién trabajar. Es muy importante este proceso porque al final trabajamos con artistas que nos flipan. También hay muchos artistas emergentes que nos envían sus diseños, y cuando nos gustan, les invitamos a formar parte de la familia Tattoonie.
Y entre todos esos artistas no te encontramos a ti. ¿Cuál es el motivo?
El 70% de los diseños de Tattoonie son míos pero no me gusta meterme en el mismo saco que los demás artistas. Más allá de las colaboraciones con artistas, Tattoonie ofrece servicios a empresas que tienen peticiones muy concretas. Ese es mi papel, recoger las ideas de los tres y darles soluciones que estén al máximo nivel. Por eso cada trabajo tiene que poder vivir dentro de nuestro universo, aunque sea un encargo. Es una de las tareas que, como diseñador, más dificultad entraña.
Háblanos de otros proyectos gráficos que hayas desarrollado recientemente.
Últimamente mi trabajo como diseñador ha estado muy ligado a la música.
He desarrollado la imagen del grupo Fru Katinka, Malva-Rosa y June´s Kaleidoscope. De la feria de música Trovam! y de los conciertos de Viveros de la Fira de Juliol. Estoy muy contento la verdad.
¿Qué parte del proceso de diseño es tu preferida?
La verdad es que disfruto mucho todo el proceso. Desde el momento en el que nace la idea más simple hasta verla pintando todas las paradas del metro. Es lo más gratificante, la visibilidad, ver que tus ideas acaban en un disco de vinilo o en mupis.
Como batería y diseñador seguro que te fijas mucho en las portadas de los discos. ¿Cuál te hubiera gustado hacer? y ¿qué grupo te gustaría que te encargara una portada?
Grace Jones. Las portadas de Grace Jones son flipantes. Y si Grizzly Bear, banda que me encanta, me pidiese un trabajo, sé que me volvería loco hasta conseguir mi mejor trabajo hasta la fecha.
Vives en el Carmen y eres un enamorado del barrio, ¿en qué lugares es fácil encontrarse contigo?
Me gusta improvisar y pocas veces me verás repitiendo sitios. Me siento muy a gusto en el Avellanes tomando un buen café, comiendo unos tacos en Wennah Poh, de tapas en la Bernarda, hablando con la orxatera del Mercat Central o tomando un puromacho en el Rincón Latino… Últimamente cruzo el Pont de Fusta para ir a la cafetería Mari Toñi, ese sitio tiene un magnetismo bestial. Me encanta.
Y por último, cuéntanos alguno de tus planes de futuro.
Con mis dos bandas Gener y Tórtel trabajaré muy duro como hasta ahora, vienen tiempos de procesos creativos y giras bastante locas. En diseño voy a empezar a trabajar mi marca, mi estudio… Tengo ganas de centrarme en ello.